Hoy os voy a enseñar mi faceta más masoquista con la tarea más costosa que he hecho.
Todo empezó cuando me enteré de que mi tercera supersobrina iba a nacer en Marzo, y como me tocaba a mí ser la tía guay, decidí hacerle una mantita con todo mi amor. No había llegado a la mitad del trabajo, cuando me arrepentí de haberla empezado.
El patrón es muy sencillo (Granny Stripe Blanket), sin complicaciones, de tal manera que perfectamente podía ver la tele mientras tejía. El error que cometí fue utilizar lana para bebé para hacer una manta (más concretamente lana "Peques" de la marca Katia) . Utilizar un hilo tan fino y sin hacerlo doble, para un trabajo tan grande hizo que le dedicara muchísimas horas. La sensación de no avanzar y pensar que no me daría tiempo para terminarlo para cuando naciera el bichejo me estresaba.
Pero después de mucho esfuerzo, y de pasarme horas y horas tejiendo conseguí terminarlo a tiempo. ¡ Y aquí el resultado!
La verdad es que me encantó cómo quedó, tanto por los colores cómo por el tacto y la forma. Y quiero pensar que tanto esfuerzo mereció la pena :D.
Lo que he aprendido con este trabajo es no volver a meterme en semejantes embrollos...Aunque bueno, ¡por las sobris, lo que sea! ;)
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