miércoles, 18 de diciembre de 2013

Bombones de chocolate y choco krispies

Esta receta va dedicada a los amantes del chocolate y yonkis del dulce, ya que se trata de un postre sencillo, rápido de hacer y que a todo el mundo le gusta. Allá vamos.

Ingredientes:
200 gr de chocolate negro
50-60 gr de mantequilla
150 gr de arroz inflado chocolateado (aproximadamente)
Las cantidades no son exactas, ya que podéis poner más o menos cereales dependiendo de cómo os guste más, o añadir más o menos mantequilla según el resultado final de los bombones.

Elaboración:
Derretir el chocolate junto con la mantequilla al baño maría o en el microondas. Si lo hacéis al microondas id con cuidado, comprobad y removed la mezcla para evitar que se queme. Cuando esté completamente derretido, mover bien la mezcla hasta que quede homogénea y se enfríe un poco (con un par de minutos valdrá).
Seguidamente se añade el arroz inflado  y se vuelve a remover bien. Entonces, fijaros en la textura, y si preferís que hayan más cereales sólo tenéis que echar más.

Una vez esté todo bien mezclado hay dos opciones:
1ª Opción: Con la ayuda de una cuchara ir rellenando moldes para bombones
2ª Opcion: Poner la mezcla en una superficie plana cubierta con papel de aluminio (fuente, bandeja del horno...) y distribuirla de manera que tenga forma de tableta de chocolate lo más plana posible y de grosor al gusto. Esta opción es más rápida y cómoda en el caso de que no tengas moldes para bombones ni tiempo, y queda igual de bueno. La última vez, por falta de tiempo y ganas hice una megatableta que después partí para repartirla:






Y sólo queda dejarlos enfriar a temperatura ambiente en invierno y en nevera en verano. Si os sobran muchos bombones, siempre queda la opción de congelar.
¡Y listos para comer!

Lo bueno de esta receta es que da mucho juego, ya que podéis sustituir el tipo de chocolate por el que más os guste (blanco o con leche) y probar con cualquier otro tipo de cereales.

Ale, ¡que os aproveche!

viernes, 6 de diciembre de 2013

Tarta de chocolate vegana

Hace tiempo que no escribo, ¡y es que no tengo tiempo! Y por eso aprovecho el ratico de antes de dormir para escribir una receta que encontré y me encantó. 

Hace un par de meses una amiga nos recomendó a mi novio y a mí que hiciéramos una dieta vegana (y libre de fritos y de alcohol) durante una semana para limpiar un poco nuestro organismo después de varios días de excesivo exceso, de los cuales no me arrepiento todavía ni lo haré mientras tenga buena salud.

Así que para hacer el menú vegano lo mas agradable y pasajero posible, empecé a buscar recetas de postres veganos (no se vivir sin dulces ni una sola semana)  hasta que me encontré con esta tarta de chocolate. En este blog utilizan como medidas métricas la "taza" y la "cuchara",  y puede resultar peligroso, porque la primera vez que hice esta tarta utilicé una taza de 330 ml de volumen, por lo que el bizcocho que me salió fue desmesuradamente grande y tuve que congelar más de la mitad (¡Menos mal que se queda igual después de descongelar!). Pero también eso me pasa por no pensar bien las cosas, carecer de previsión y por vivir a medio camino de la tierra y la luna. Una persona normal se hubiera dado cuenta que usando la taza más grande que tenía a mano, previsiblemente, el bizcocho saldría de un tamaño monstruoso.

Una vez aprendida la lección, utilicé una taza de 200 ml y me salió una tarta de tamaño razonable. Ahora explicaré cómo la hice yo, ya que había ingredientes que no tenía, y otros que veía innecesarios utilizar en mi caso:


Ingredientes:
2 y 1/4 de tazas de Agua caliente
3/4 de taza de aceite de girasol
2 tazas de azúcar moreno
3 tazas de harina para bizcocho de hacendado
1/2 taza de Cacao puro en polvo Valor.
Una cucharadita de levadura en polvo (añadir más levadura si se usa harina normal)
Media cucharadita de sal
2 cucharadas de vinagre blanco
1 cucharada de café soluble (yo no le puse porque no tenía)
2 cucharadas de esencia de vainilla  (si no tenéis, siempre podéis usar el azúcar avainillado)

Preparación:
Primero de todo, precalentar el horno a unos 180ºC, y si es necesario, untar el molde con margarina para que no se pegue.

Seguidamente tamizar la harina, con el cacao en polvo, la levadura y la sal y añadir el azúcar moreno.

En otro recipiente mezclar todos los componentes húmedos (agua, aceite, vinagre y esencia de vainilla), y después añadir los ingredientes secos, y mezclar hasta que quede una pasta homogénea.

A continuación sólo queda verter la mezcla en un molde, y luego meterlo en el horno durante unos 45 minutos aproximadamente, o hasta que al pincharlo con un cuchillo o pincho, este salga completamente limpio.

Una vez se ha enfriado, sólo queda desmoldarlo y decorarlo al gusto.



A mi, estas tartas no me quedan muy presentables, ya que no tengo moldes con formas chulas ni nada (tampoco se me da bien la decoración, para qué nos vamos a engañar). Pero lo importante es que salga buena, y sinceramente, esta tarta es una p*t* droga, con perdón por la expresión tan soez utilizada.

Otra cosa que me encanta de esta tarta, es que lo puede comer tanto los intolerantes al huevo como a la lactosa, que los pobrecillos lo tienen difícil para comer gran cantidad de postres.
También es una receta ideal para los veganos, ya que no se usan alimentos de origen animal. En fin, una receta para toda la familia, por muy dispar que sea.

Así que os animo a todos a hacerla, y a que engordéis conmigo.

¡Hasta otra!

domingo, 24 de noviembre de 2013

Donde caben dos, caben tres

Mi pareja y yo hace tiempo que vivimos juntos, y desde siempre nos ha hecho ilusión tener con nosotros un perro. Pero siempre estábamos en una situación en la que no nos lo podíamos permitir: un piso pequeño, a penas llegábamos a fin de mes, no teníamos tiempo... Pero con el paso del tiempo, hemos llegado a una situación de estabilidad en la que podíamos permitirnos, por fin, incluir un perro en nuestras vidas.

Así que la semana pasada, me puse a buscar en las protectoras más cercanas a mi casa algún cachorrito abandonado que necesitara un hogar.  Y el primer día de búsqueda encontré en la protectora de l'Hospitalet del llobregat,  D.A.R (Defensa Animal Rescue), en la que tenían cachorritos. Y allí, mi pareja y yo nos enamoramos de ella: 







Se llama Arya, tiene tres meses y es la cosa más guapa, rebonica, buena y maja que os podríais echar a la cara. Y sinceramente, da una alegría tremenda tenerla en casa y ver cómo corretea torpemente por el parque.

Esta entrada no es sólo para presumir de este perfecto cánido, si no también para contar que fue encontrada por el Delta del Ebro, abandonada junto a sus hermanos. 
Es lamentable que se siga abandonando perros a su suerte, simplemente porque sus dueños se hayan cansado de ellos o porque se nieguen a hacerse cargo de una perra embarazada y de sus cachorros, porque no quisieron gastarse el dinero en esterilizar a sus mascotas para evitar esta situación.

Lo que quiero decir, es que, si  se adopta/compra un perro es sabiendo que eso implica unas responsabilidades y que no podemos dejarlo en la cuneta cuando nos cansemos de él. Es algo que hay que pensar, y sólo adoptarlo si se es capaz de hacerse cargo de animal. Si no, más vale no adoptar ninguno.

Pero lo más importante ahora, es que esta perrita, ahora, tiene un buen hogar :D.

jueves, 14 de noviembre de 2013

Cookies de chocolate

En mi casa, seguimos estando de dieta. Ya llevamos un mes y nos va bien. En posts anteriores pudisteis ver como tuve una recaída y terminé haciendo una tarta de manzana. Esta semana he vuelto a recaer vilmente. Mi cuerpo me pedía chocolate, así que decidí hacer cookies con pepitas de chocolate. Pero a mi perversa y lujuriosa mente no le parecía suficiente, así que decidió modificar la receta añadiendo cacao en polvo y nocilla para convertir una simples galletas en bombas de chocolate. Y esto fue lo que hice:

Ingredientes:
170 gr de mantequilla
170 gr de azúcar moreno
340 gr de harina
1 cucharada de levadura
2 huevos
1 cucharada de azúcar vainillado
una pizca de sal
175 gr de pepitas de chocolate negro
4 cucharadas de cacao en polvo puro
3 cucharadas de nocilla/nutella/cremadecacaomarcablanca

Preparación
En un bol mezclamos bien la mantequilla fundida con el azúcar moreno y los huevos batidos. Seguidamente se le añade la harina tamizada, la sal y la levadura y se sigue moviendo hasta que la mezcla quede homogénea. La masa es muy pastosa, así que para mezclarlo lo mejor es utilizar una cuchara de madera o algo así, nada de varillas eléctricas ni batidoras.

Después he añadido el cacao en polvo y la nocilla, y otra vez a remover bien. Por último añadir las pepitas de chocolate y mezclarlo todo.

Mientras precalentamos el horno a 200 ºC, colocamos papel vegetal en la bandeja del horno, y ponemos  montoncitos de masa (cada montoncito equivale a una cucharada) bastante separados entre sí.
Que luego las condenadas crecen y se pueden amontonar.

Aproximadamente han de estar unos diez minutos horneándose a 170ºC, vigilando que no se quemen. El tiempo de cocción dependerá de cada horno.

Y así quedaron:







Cómo soy una persona muy egoísta, repartí las galletas entre algunos amigos y amigas, para  así no engordar sola. Lo malo es que al final me quedé con muy pocas galletas (desde mi punto de vista) y mi gula no ha sido completamente saciada, por lo que no descarto hacer otro postre de chocolate en breve.


¡Hasta pronto!





domingo, 10 de noviembre de 2013

Porta-meriendas

Hace pocos días fui a casa de una amiga a visitarla y a comer con ella. Y como las dos somos ambientólogas (algunos nos llamarán hipies), empezamos a hablar sobre la generación de residuos, y de cómo minimizar la creación de los mismos. En ese momento le comenté mi intención de comprarme un envoltorio reutilizable para bocadillos, para evitar así, el consumo de papel de aluminio cada vez que tengo que comer fuera de casa.

Y es que hay una empresa llamada  Boc'n Roll, que se dedica a hacer estos envoltorios reutilizables, no sólo para bocadillos, sino también para aperitivos, fruta y bebidas.

Pero enseguida que le comenté que me lo iba a comprar, me dijo "¡Ni se te ocurra gastarte el dinero, eso te lo hago yo en un momento!". Y eso hizo esta majedad de persona. Me dio un millar de telas para que eligiera el color que más me gustara, cogió una tela blanca,  un plástico llamado hule transparente y velcro.

Hizo tres rectangulos iguales con las dos telas y el hule (que se puede comprar el cualquier ferretería), puso en marcha su máquina de coser... y ¡Voilà! En  media hora ya tenía mi porta-bocadillos. Y así quedó: 





Y desde entonces, lo uso para envolver la comida que me vaya a llevar, como bocadillos, galletas y fruta.
La verdad es que es un objeto muy útil y funcional, sobretodo para los niños, que siempre llevan el bocata a clase. De esta manera se ahorra mucho en papel de aluminio o de film, y ayudamos al medio ambiente.

Para aquellas personas que prefieran hacérselo ellas mismas que comprárselo, sólo tienen que buscar por San Google, y en seguida habrá un millar de páginas donde expliquen cómo se hace. Cuando aprenda a utilizar mi máquina de coser, intentaré hacer unos cuantos.

Por otra parte, comentar que hace poco me compré esta botella de plástico reutilizable, en la tienda Ale-Hop, aunque como ya he comentado antes, lo podemos encontrar en la tienda de boc'n roll. Es muy cómoda, pesa poco y cuando está vacía se puede plegar para que ocupe poco espacio, siendo una mejor alternativa a las botellas de plástico no reutilizables.




Espero que os haya sido útil esta entrada :D

¡Hasta luego!

sábado, 2 de noviembre de 2013

O'Chispas

El otro día fui con unos amigos a un restaurante de Hospitalet del Llobregat, que no paraban de recomendarme. Se trata de un restaurante gallego  llamado O'Chispas, situado en el barrio de la Florida.



El local es realmente grande, y aun así se llena con facilidad. Cómo iba con gente asidua a este restaurante, me puse en sus manos y dejé que eligieran lo que más les gustaba a ellos. Para beber, cómo no, pedimos vino turbio (este maldito brebaje me llevará por el mal camino).


De entrantes pedimos cuatro platos para compartir: oreja de cerdo, pimientos de padrón, lacón asado y lacón cocido. Los pimientos de padrón y la oreja estaban muy buenas, pero los dos lacones me parecieron espectaculares. Tenían mucho sabor y estaban muy tiernos los dos, aunque yo devoré el lacón cocido como si no hubiera un mañana.

Aquí va una foto de la familia de entrantes al completo:


Os presento al lacón asado:


Aquí podemos ver a la oreja de cerdo:

Mi adorado lacón cocido:

Después de los entrantes y de terminar la primera botella de turbio, vinieron los segundos. Muchos amigos me recomendaron que pidiera el codillo, ya que, según ellos era impresionante. Y cómo yo había ido hasta allí para jugar, decidí hacerles caso.
Y esta es la pinta que tenía:


Puede que el aspecto no sea lo más atractivo del plato, pero está riquísimo.  No hace falta cortarlo con el cuchillo porque la carne se deshace y el sabor sólo puedo calificarlo de brutal. Y por suerte, estaba tan llena que no pude ni terminármelo. Así que pedí lo que sobró para llevar y al día siguiente me hice un bocadillo con la carne. ¡Estaba increíble!

Así que si algún día os perdéis por L' Hospitalet, no dudéis en pasaros por aquí. Aunque eso sí, el precio pica un poco, ya que puede salir a 25 euros por cabeza.

Aunque ya sabéis que dicen, ¡una vez al año, no hace daño!

martes, 29 de octubre de 2013

Tarta de manzana


Después de un verano de tapas, helados y horchatas, llega un otoño lleno de dulce arrepentimiento. Por eso mismo, hace un par de semanas que decidí hacer dieta (simplemente huir de los fritos y los dulces, nada especial).
Y es en esos momentos en los que tomo esas decisiones, cuando se enciende un interruptor en mi cabeza  que activa una vocecilla que me dice: "¿Y si hago una tarta? ¿Una tarta de chocolate?¿O mejor dos kilos de galletas? Mmm...no se si con dos bandejas de bombones habrá suficiente para dos personas..."

Y esa es la historia de mi vida. Pero he escrito este rollo para introducir la receta de la tarta de manzana que hice ayer, el octavo día de la dieta.

Ingredientes:
1 vaso de harina (150 gr aprox)
1 vaso de azúcar (250 gr aprox)
3 huevos
3 cucharadas soperas de mantequilla
2 o 3 manzanas cortadas en láminas finas
1 sobre de levadura en polvo
Mermelada ( preferiblemente de melocotón, albaricoque o naranja)

Preparación:
Pelar las manzanas y cortarlas en láminas muy finas y reservarlas.
Añadir en un bol los tres huevos con la levadura y la mantequilla derretida y batir muy bien. Seguidamente se añade el vaso de harina,y se continua batiendo. Después, añadir el azúcar y volver a batir hasta obtener una masa uniforme.

En un molde previamente untado con mantequilla, verter la mitad de la masa. Seguidamente, cubrir con una capa de manzana. Echar el resto de masa. Por último, cubrir la capa superficial con manzana, de manera que quede bonita y lo más presentable posible.

Precalentar el horno a 200 ºC . Poner la tarta en el horno a unos 170 ºC hasta que se dore la parte de arriba. Tardará aproximadamente 30-40 minutos, todo dependerá del tipo de horno que tengais.
Una vez la tarta esté dorada por arriba, hay que aplicar una fina capa de mermelada en la superficie y meterlo otra vez en el horno durante 5 minutos.

¡Y lista para comer!




Cuando aprendí a hacer esta tarta, tenía un horno eléctrico, y me salía perfecta. Pero cada vez que me cambiaba de horno, tenía que aprender otra vez a hacerla, ya que los tiempos de horneado y la potencia nunca era la misma.

Y hace un par de meses, que me cambié de piso, y con el piso venía un nuevo horno, pero esta vez de gas. Todavía no lo controlo muy bien, y para que me saliera bien esta tarta he tenido que hacerla tres veces. La primera vez se me quemó por debajo y se quedó cruda por arriba, ofreciendo un aspecto más que lamentable.

Ahora por suerte, he conseguido cogerle el punto al horno de gas:
Primero se ha de precalentar durante 10-15 minutos a fuego máximo. Una vez vez esté caliente, bajar al mínimo y meter la tarta. fui a comprobarlo cada 10 minutos, pero a los 40 ya estaba casi hecha. La puse al grill otros cinco minutos para que la parte de arriba se hiciera bien. Añadí la mermelada y lo dejé dentro otros cinco minutos. En total casi una hora cocinándose.

Y bueno, eso es todo.
¡Qué aproveche!


PD: Creo que seguiré haciendo dieta bastante tiempo, así que seguramente acabe subiendo recetas hipercalóricas semalmente.